Destinypedia
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Cita inicio Nunca pensé que una máquina pudiera sentir odio. Cita final

—descripción del Grimorio


Sepiks Prime fue el Sirviente Primario de la Casa de los Demonios, asistido por Riksis, Arconte de los Demonios. Era adorado por los Demonios como un "Dios-Máquina" hasta su destrucción por los Guardianes en la Guarida de los Demonios. Dos años después, Sepiks fue reconstruido y perfeccionado con la SIVA de los Demonios Simbiontes, volviéndose una vez un blanco prioritario para la Vanguardia.

Biografía[]

Historia Temprana[]

Cita inicio Sepiks Prime proyectaba una sombra sobre nuestra ciudad. Tras su destrucción, los Demonios Caídos se debilitarán. Cita final

Comandante Zavala


Tras la muerte de Solkis, Kell de los Demonios, la Casa de los Demonios estableció una fortaleza dentro del Cosmódromo de la Antigua Rusia. Ausente de su Kell, el Sirviente Primario de los Demonios, Sepiks, ganó prominencia dentro de la Casa y gobernó a los Demonios junto a Riksis, Arconte de los Demonios; quién le sirvió como asistente y practicante de su voluntad. La falta de liderazgo político también permitió a Craask, Kell de los Reyes, ejercer su influencia entre los líderes tecno-adoradores de los Demonios y gobernarlos desde las sombras.

En algún momento, la autoridad de Sepiks fue desafiada cuando un grupo de científicos venerados, los Demonios Simbiontes, se separaron de su Casa mientras buscaban la libertad de la subsistencia en el Éter y la evolución con tecnología. Entre ellos estaba el antiguo Sacerdote Arconte Aksis, quien dirigió a los Simbiontes.

La mayoría de los Demonios se instalaron cerca de una antigua nave colonia, la Espira del Diablo, y establecieron la Guarida de los Demonios como un punto para que los adoradores ofrecieran tributo a su dios máquina en forma de cráneos de Guardianes muertos. Al igual que muchos otros Sirvientes, Sepiks Prime nació a imagen del Viajero y los Demonios hicieron todo lo posible para proteger su principal fuente de Éter. El Sirviente Primario también generó su propia línea de Altos Sirvientes, como Sepiks-23.

Ataque a los Demonios[]

Cita inicio Bajo las ruinas del Cosmódromo, a la sombra de una vieja nave colonia, encontramos la guarida de la Casa de los Demonios... y al gran sirviente que les proporciona su fuerza. Destruyamos a este dios de las máquinas... y enviemos sus almas de vuelta al infierno Cita final

Comandante Zavala


Durante años, el paradero de Sepiks permaneció en misterio, pero los rumores insinuaron su presencia dentro del Cosmódromo. El dominio de los Demonios fue indiscutible durante siglos hasta que un Guardián recién resucitado mató a su Arconte, Riksis. Esto se celebró como la primera gran victoria contra los Demonios desde la Batalla de la Grieta del Crepúsculo y Sepiks se volvería vulnerabe, causando que los Demonios aumentaran su seguridad para Sepiks. Reuniendo a su nobleza Caída como Naksis, Barón de los Demonios, y desplegando a un Caminante Caído para disuadir a cualquier de atacar al Sirviente Primario.

El Comandante de la Vanguardia Zavala localizó la posición del Sirviente debajo de una nave colonia y coordinó un Asalto contra Sepiks. A su llegada, los Guardianes entraron en un fuego cruzado entre la Colmena y los Demonios que protegían la entrada a su guarida, desactivaron una barrera de seguridad y eliminaron a su Barón y Caminante para llegar a la Guarida de los Demonios.

Cuando entraron en la guarida, la escuadra descubrió a Sepiks protegido por un escudo de inmunidad junto con sus adoradores, después de eliminar a los Caídos del sitio, el Sirviente Primario desactivaría su escudo para atacar personalmente a los Guardianes, resultando en una batalla entre la escuadra y Sepiks. Durante la lucha, Sepiks los bombardeó continuamente con sus ataques mientras convocaba refuerzos para defenderse, y también se teletransportaba por la zona para evadir los disparos. Pero a pesar de sus tácticas, Sepiks fue destruido, lo que paralizaría el liderazgo de los Demonios y terminaría con la mayor amenaza para la Última Ciudad.

Después, los Demonios intentaron reemplazar a Riksis con un Aspirante a Arconte llamado Karrhis, Aspirante a Arconte, con la esperanza de revivir a Sepiks, pero también fue asesinado en una misión de Patrulla. Más tarde, durante la Guerra de los Poseídos, el Guardián trató de adquirir un motor sigiloso escondido en la Espira del Diablo y encontró los restos destruidos de Sepiks en la Guarida de los Demonios.

Regreso de Sepiks[]

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Sepiks Perfeccionado

Cita inicio La Casa de los Demonios te ha registrado como enemigo público número 1, después de que te cargaras a su sirviente primario, pero... tu viejo amigo, Sepiks Prime, ha vuelto y, por lo visto, está más en forma que nunca, gracias a los Demonios simbiontes y a la SIVA Cita final

Shiro-4


Tras la desaparición del liderazgo de los Demonios, los marginados Demonios Simbiontes regresarían para reorganizar su Casa y trasladarían recursos masivos a las Tierras Pestíferas después de que descubrieran la tecnología de la Edad de Oro de autorreplicación, la SIVA. El Sacerdote Arconte Aksis ordenó a sus bioingenieros que reconstruyeran a su antiguo Sirviente Primario y lo perfeccionaran con SIVA. Los Simbiontes buscaron usar el renacimiento de Sepiks para reclutar a otros Demonios para que se unieran a su movimiento, trayendo ofrendas de SIVA y ganando influencia completa sobre la Casa al controlar el flujo de Éter.

Más tarde, un grupo de Demonios asaltó el Pico de Felwinter para aprender más sobra la SIVA, haciendo que Lord Saladino enviara a los Guardianes a investigar el Observatorio Vostok y asegurar el Templo de Hierro, y mantener sus secretos contenidos sobre la SIVA lejos de los Caídos. Para sorpresa del Espectro, se encuentran con Sepiks que trató de establecer un punto de apoyo en la montaña, emitiendo una extraña firma de energía mientras se regeneraba. Lord Saladino inmediatamente ordenó destruirlo ya que creía que las puertas del Templo de Hierro no eran lo suficientemente fuertes para contener al Sirviente Perfeccionado.

Sepiks fue encontrado más tarde asaltando la entrada del Templo con su armamento mejorado con SIVA y protegido por un escudo de inmunidad. Al detectar a los Guardianes, apagó su escudo y comenzó a atacarlos a la par que se teletransportaba por la zona y solicitaba refuerzos de los Demonios. Los Guardianes consiguieron destruir a Sepiks, sin embargo, debido a sus capacidades regenerativas, Sepiks se reconstruyó y se retiró al Cosmódromo. Shiro-4 detectaría múltiples impactos en la Sección 17 de la muralla del Cosmódromo y Saladino ordenó a los Guardianes que detengan a Sepiks, ya que se implicó el descubrimiento de la SIVA por parte de los Demonios.

Con los Kell Caídos desaparecidos, la reorganización de una fuerza militar se consideró casi imposible hasta el resurgimiento de Sepiks. Shiro se preguntó si podrían usar sensores para ver hasta dónde se extendieron sus operaciones, pero Saladino respondió que los Caídos eran irrelevantes y la principal prioridad era encontrar a Sepiks para comprender la corrupción de SIVA.

Un Asalto fue coordinado por Shiro para romper las defensas de los Caídos y destruir a Sepiks Perfeccionado en su antigua Guarida de los Demonios. Los Simbiontes emplearon defensas similares al primer encuentro contra los Guardianes, con Dresiks, Barón Simbionte y un Caminante Simbionte. En la Guarida, los Guardianes encontraron a Sepiks protegido por un escudo de inmunidad que solo podía ser apagado destruyendo los nodos de SIVA cercanos. Sepiks se dispuso a pelear con apoyo de refuerzos Simbiontes y un escudo que solo podía apagarse con el uso de Cañones de Quemado, Choque o Tinieblas. Una vez más, a pesar de contar con la SIVA, Sepiks fue destruido para siempre.

Lista de Apariciones[]

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